Cuidemos nuestra comunidad: evitemos arrojar brasas en los residuos.
Este invierno, es fundamental colaborar para prevenir los accidentes habituales que ocurren debido a la disposición incorrecta de brasas o cenizas aún encendidas entre los residuos. Siguiendo medidas de seguridad adecuadas, podemos garantizar que los desechos generados por chimeneas o cualquier tipo de calefacción a leña estén completamente apagados antes de sacarlos para que los recolectores los retiren.
Es de suma importancia NO tirar los restos de braseros, estufas y chimeneas (incluso después de asados o parrilladas) hasta que estén completamente fríos. Para su depósito seguro en contenedores o canastos de residuos, deben transcurrir al menos 48 horas desde su retirada. Si es posible, dejalos al aire libre en el patio o parcela para asegurar que se enfríen por completo.
Arrojar brasas encendidas en los residuos domiciliarios puede representar un grave peligro para todos. No solo aumenta el riesgo de incendios, sino que también pone en peligro la salud de los trabajadores encargados de la recolección y separación de residuos. Por favor, seamos responsables y evitemos esta práctica.
¡¡Cuidemos juntos de nuestra seguridad y bienestar!!